
- No, no funciono solo. Funciono en patota. Todos juntos para adelante siempre. Ahí me animo a hacer de todo. Soy un bicho de recital: si no toco, no existo como persona. Te lo juro por mi abuela, que está muerta. Nosotros nunca ensayamos, ni tenemos lista de temas armada: salimos y tocamos. Siempre fue así, con Jóvenes Pordioseros y con Hijos del Oeste.
- ¿Y qué hacés durante la semana?
- Salgo a la noche, ando en auto solo, pensando, componiendo. Tengo MP3, escucho discos sin parar, me comí toda la discografía de Attaque 77. Y mucho Rolling Stones, obvio. Le doy y le doy. Me voy a las 12 y vuelvo a las 4. Estoy metiéndome mucha información en la cabeza. Y estoy yendo a recitales de Almafuerte, los heavies me tratan muy bien. Me saludan, me dicen: “¡Aguante, venís a ver a Ricardo!”.
- ¿Estás al tanto de las últimas andanzas de Pity?
- Estoy deseando que se recupere, porque lo quiero mucho. Lo quiero tanto que incluso a veces preferiría no cruzármelo. Las drogas son para disfrutar: cuando se te van de las manos, ya no sirve. Cuando afecta tu vida personal, no está bueno. Cuando yo estuve mal, perdí amigos y a mi mujer. Toqué fondo, pero tuve personas que me sacaron adelante. Sino hoy no estaría acá charlando con vos.
(outtake de la entrevista al Toti Iglesias en el Suple Si! y el regreso de LJP)